QUINITO LÓPEZ MOURELLE - PIMIENTA NEGRA

QUINITO LÓPEZ MOURELLE - PIMIENTA NEGRA

Tercera novela del periodista, escritor y músico gallego Quinito López Mourelle, tras su debut con “La Ciaboga” y su posterior “Confines”, ambas herederas de la experiencias latinoamericana (vivó en Brasil una larga temporada) del autor.
Al final del libro el autor escribe: “No soy un novelista, si acaso un torpe improvisador”, y está es una de las claves que puede servir para entender este libro; pues Mourelle lo que parece que ha pretendido es llevar al ámbito de la literatura lo que es norma habitual en el Jazz; es decir, la improvisación, el cambio de ritmos y temas, sobre una misma composición. Y es que López Mourelle también es músico, pianista en concreto, tal y como queda patente en el cedé que acompaña al libro; donde se recogen once creaciones del escritor.
Y este, me temo, que es, ¡ay!, el problema de la novela, pues el lector queda despistado en más de una ocasión debido a los saltos temporales y espaciales de la narración; pues se puede ir de Nueva York a Senegal y a un pueblo gallego (es un suponer, pues en ningún momento lo indica localización geográfica el autor) sin ningún tipo de solución de continuidad. Si Thomas Bernhard tomaba la repetición de motivos, como si de piezas de música clásica se tratase, para sus relatos, Mourelle se adentra en el resbaladizo terreno del salto, el cambio y la discontinuidad del jazz.
Esta es una obra coral que tiene dos elementos comunes: las relaciones sentimentales y el jazz. La primera se articula a través de los líos amorosos entre varias parejas que se producen en tiempos y lugares diferentes, aunque al final…bueno el final no lo voy a desvelar. La segunda, tiene sus ejes en la narración de la grabación del mítico “Body and Soul” de Coleman Hawkins, que es, de lejos, lo más interesante; y el descubrimiento del jazz de un niño -´Teófilo- y su aprendizaje en los locales de Dakar.
“Pimienta Negra” no es una narración para neófitos, pues se trata de una literatura densa y difícil.
Paradójicamente –o tal vez no por aquello de la ley de las compensaciones- el disco de Quinito López Mourelle, donde está acompañado por algunos de los nombres más granados del jazz que se hace en Galicia, es un trabajo muy fácil de escuchar, con un jazz que bebe de las fuentes del bop y el hard.
Tal vez para leer esta novela sea necesario escuchar este disco, de la misma mañanera que el autor da cuenta de los discos que ha escuchado a la largo de la escritura de esta “Pimienta Negra”.

Doc Jota Punto

Editorial: Ezaro
Páginas: 285
Año: 2009